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El pasado 8 de septiembre de 2014, Foro de Foros organizó la Conversación Intergeneracional “Rafael Matesanz – En busca de la excelencia».
Abordamos la “Excelencia” que ha hecho posible que la Organización Nacional de Trasplantes (ONT), creada en España en 1989, se haya convertido en líder mundial en donaciones. Hubo algunos intentos anteriores, pero fallidos, hasta que la presión de los enfermos necesitados de trasplantes resultó incontestable. La ONT cuenta actualmente con un presupuesto de cuatro millones de euros, y trabajan en ella alrededor de 40 personas: se trata de una estructura de carácter autónomo, muy coordinada con las comunidades autónomas, bajo el amparo del Sistema Nacional de Salud. El aspecto clave fue encontrar la persona idónea que desempeñase la función de coordinador en cada lugar. España tenía en 1989 14 donantes por millón; en 1992 ya era el primer país donante del globo: hoy estamos en una media de 35 donantes por millón (p.ej. Alemania tiene 10 donantes por millón).
Para que puedas forjarte tu propio criterio y conocer la mayor cantidad de puntos de vista sobre este tema, hemos recopilado lo más interesante de la sesión.
Manolo Rodríguez Casanueva
Este nivel de excelencia no se ha logrado en estos años de modo improvisado, sino a través de un sistema innovador, igualitario, descentralizado, estableciéndose como un interface entre la Administración Sanitaria y los médicos en los hospitales. Calculando que se demandan un millón de trasplantes en todo el mundo, España es la referencia en este sentido. En estos veinticinco años se han realizado 90.000 trasplantes, así como cerca de 400.000 entretejidos, medulas y cordones. Cerca de 500.000 españoles han recibido algún tipo de trasplante hasta la fecha.
A la ONT no se le ha conocido ningún escándalo. La transparente toma de decisiones, de carácter colegiado, hace imposible torcer el sistema de asignación de recursos, al contrario que en el caso alemán, con un tipo de organización pública-privada. No hay médico, político o periodista famoso que pueda colarse en la lista de espera de la ONT.
Se comentó que puesto que las donaciones son altruistas, ¿por qué alguien no puede vender alguno de sus órganos? La OMS calcula que de los 114 mil trasplantes realizados al año, entre el 5 y el 10 % están sometidos a algún tipo de comercialización. The New York Times ha sostenido un debate acerca de un mercado regulado; la mayoría de la comunidad médica sostiene que dicha tendencia comercializadora nos retrocedería a la Edad Media, favoreciendo las diferencias sociales.
Al principio, mantener el equilibrio de la ONT frente a los veleidades políticas de cada momento fue complicado, pero finalmente se consiguió. Doce ministros de Sanidad y alrededor de un centenar de consejeros autonómicos en estos veinticinco años atestiguan que los políticos pasan, pero la ONT sigue. La profesionalización de la ONT está fuera de duda: cerca de 2 millones de euros se destinan la formación de 15000 especialistas en urgencias, neurólogos, intensivistas, personal de enfermería, etc. La relación de estos profesionales con los medios de comunicación, que son quienes difunden el impacto del servicio, es esencial.
Para conseguir la excelencia, ¿cómo se consigue un alto nivel de donación? El Eurobarómetro señala que la media de la Unión Europea está en el 56% a favor de donar un órgano propio; España anda por el 57%, los países nórdicos rondan el 80%. No obstante, en contraste a éstos, España triplica el número de donaciones. Esta aparente contradicción se explica porque la ONT no quiere convencer a la población, sino a las familias que puedan donar. Nadie se hace donante ante un cartel colgado en un hospital, considerando que cada vez es más complejo lograr nuevos donantes, pues afortunadamente cayó con el paso del tiempo la tasa de aquellos que lo fueron por accidentes mortales de tráfico, etc.
La metodología benchmarking aplicada través de varios pasos, como son la detección del donante, la petición a la familia del mismo a través de un formato especial de entrevista, y otras cuestiones ha sido esencial para los logros alcanzados por la ONT. No obstante, no hay motivos para la autosatisfacción. El envejecimiento de donantes y receptores en España es un problema creciente. El invierno demográfico en nuestro país dificulta la labor de la ONT, ya que es imprescindible adecuar la oferta y demanda de órganos en función de cada nivel de edad.
En el Seminario Permanente 2020 se conversó acerca de una hipotética privatización del sistema de trasplantes – como se practica en algún país europeo- pero se señaló que tal privatización empeoraría el modelo español tal como lo conocemos.
El choque cultural entre civilizaciones que supone la donación asimismo fue debatido. Contra lo que en un principio pudiera parecer, los inmigrantes están donando en la misma proporción que los demás ciudadanos que habitan nuestro país.
En suma, la ONT se ha convertido en una suerte de orgullo patrio, impulsada por los médicos profesionalmente más ambiciosos, pese a que la situación actual de la medicina resulte desmotivadora por diferentes razones (recortes, reducción de plantillas,…) salvo en la cuestión relativa a los trasplantes.
El largo liderazgo de la ONT, basado en el sentido de que todo el equipo lo siente como propio, creyendo en la bondad y la excelencia de lo que hace, hace por ello que la opinión pública tenga la más alta consideración de esta institución, además de que los participantes al Seminario Permanente 2020 aprecien que la ONT sí que hace Marca España.
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