José Ignacio Goirigolzarri - Oportunidades y riesgos en el sistema financiero

Después de una reconversión con más de 13.000 oficinas cerradas y 70.000 puestos de trabajo menos, los retos que en general se plantean en la actualidad las entidades crediticias y financieras en nuestro país resultan no menos de tres. A saber: primero, el entorno estratégico al que ha acondicionarse la banca en nuestro país; segundo, los problemas inherentes de rentabilidad; y tercero, las cuestiones relacionadas con la reputación e imagen del sector.

Se comentó asimismo que parece existir un divorcio entre la realidad del sistema financiero, por un lado, y la percepción que tiene la sociedad al respecto, por otro. El sistema hoy ofrece una amplia calidad de servicios, además de permitir una rentabilidad, que hace posible no creer necesariamente esa dicotomía, más o menos generalizada, entre “economía financiera” versus “economía real”.

Interrogantes como ¿merecen los banqueros ganar el salario que ganan?, o ¿por qué no se ha mejorado la reputación de la banca en España? se plantearon a lo largo de la Conversación, señalándose que se hacen esfuerzos reputacionales, aunque tales no alcanzan al sector financiero al completo.

Considerando, además, que históricamente la elasticidad PIB-crédito en España suele ser alta, acaso, se dijo, debiera haber una elasticidad menor, como la que hay ahora, a la que la sociedad tendrá que ir acostumbrándose. En cierto sentido, decir que “la gente tiene miedo al crédito” no dejará de ser, con el paso del tiempo, una frase extemporánea, visto el fenómeno de la última burbuja financiera e inmobiliaria.

Después de constatar que los tipos de interés permanecerán bajos durante cierto tiempo en la Unión Europea, se consideró que tienen sinergias dudosas los movimientos de fusión o de adquisición de bancos en nuestro continente. Más bien, al contrario, lo que se verán son más consolidaciones domésticas. Se apuntó que habrá un descenso paulatino de la prima de riesgo, al mismo tiempo que el sector financiero tendrá que alcanzar mayores ajustes en sus costes. La innovación tecnológica fue otro asunto que se puso sobre la mesa. En este sentido, en realidad la tan anunciada “virtualización de la banca” la decidirán al final los clientes, y no tanto las posibilidades tecnológicas que puedan aplicarse de modo inmediato.

La situación del sistema financiero español es dada a conocer por parte de los representantes del FROB periódicamente ante el Parlamento, pero, pese a todo, quizá no sea objeto de interés para los medios de comunicación, con las inevitables consecuencias que esa situación trae consigo, fue otro aspecto que en la Conversación Intergeneracional se destacó.

Atendiendo a aspectos de medio y largo plazo, ¿se producen en la banca rupturas en su cadena de valor? Es probable. Ejemplos como PayPal parecen demostrarlo. Se aseveró que, en este sentido, el ataque a la banca tradicional vendrá de parte de tales medios de pago.

Por último, la industrialización de la gestión es el reto al que de hacer frente la banca española a largo plazo. Tener un gestor de relación, un gestor que se comunique con sus clientes con eficiencia, en suma, resulta una necesidad ineludible considerando que, vistos los obstáculos con los que a veces se encuentra el sector en su proyección exterior, no es fácil replicar las habilidades directivas inherentes a la actividad bancaria.